Arquitectura

Cultura en Salta

La arquitectura salteña es rica en estilos que deslumbran al visitante y muestran su importancia histórica y el crecimiento constante de la provincia, que a partir de la creación del Virreinato del Río de la Plata a fines del siglo XVIII, recibió diversas influencias que se plasman en todos los ámbitos de la cultura.

El Arq. Mario Lazarovich explica que hasta el inicio del Virreinato, la arquitectura estaba a cargo de alarifes, constructores militares, religiosos, pero “en todos fue el resultado del  empirismo y la transculturación peninsular plasmada en esta región”. Asimismo, destaca la utilización de materiales locales como la piedra, el adobe y la madera, que dan las características especiales a las construcciones “con cierta influencia de la arquitectura colonial andina del Alto Perú”. Según la influencia aparecían patios, balcones de madera, tejados a la vista y mayólicas.

El Cabildo Histórico de Salta es una muestra de arquitectura colonial pública y se caracteriza por sus recovas. Si bien una de sus partes fue removida, es uno de los pocos Cabildos casi completos de la Argentina y conformaría el origen de la plaza porticada de Salta, única en el país”. Fuera del ámbito público, se destacan como arquitectura colonial doméstica la Casa de Arias  Rengel, Casa de Hernández y Casa Uriburu.

El profesional indica que los pocos ejemplos de arquitectura colonial religiosa tiene como ejemplo al Convento San Bernardo, cuya capilla comenzó a construirse en 1723, y la cúpula y la nave de la Iglesia San Francisco.
Las casonas rurales seguirán en el siglo XIX la línea colonial, así en el siglo XX se incorpora a la trama urbana el Mercado Artesanal. La llegada de la inmigración, sobre todo italianos, inició un cambio en el estilo arquitectónico.

“El fin del siglo XIX y los primeros años del XX encontraron a Salta en un desarrollo constructivo tan grande y vertiginoso como nunca había tenido hasta entonces y esto  produjo una expansión urbana”, sostiene Lazarovich. Este estilo conocido como Académico con influencia italiana, dio lugar a fachadas y construcción de edificios dentro de la arquitectura religiosa, entre los que se destacan las iglesias Catedral, San Francisco y La Viña.